MÁS SOBRE EL MITSUBISHI L200 MK (1996-2006)

La Mitsubishi L200 (MK), producida entre 1996 y 2006, se caracterizó por un diseño robusto y funcional. Su carrocería, disponible en versiones pick-up de cabina simple y doble, ofrecía una estética angulosa y práctica, adecuada para el trabajo duro y la conducción off-road. La resistencia de sus materiales y la protección contra la corrosión eran puntos fuertes, aunque la estética se consideraba algo anticuada al final de su ciclo de vida, en comparación con modelos más modernos.

Mecánica y Motorización

La gama de motores de la L200 (MK) incluía opciones diésel y gasolina, con diferentes cilindradas y potencias. Los motores diésel, generalmente más populares, destacaban por su par motor a bajas revoluciones, ideal para tareas de remolque y conducción en terrenos difíciles. Las versiones de gasolina, aunque menos comunes, ofrecían una respuesta más ágil pero un consumo de combustible superior. Las especificaciones exactas variaban según el mercado y el año de fabricación. La tracción era generalmente trasera, aunque existían versiones con tracción total (4x4) con diferentes sistemas de reparto de la tracción, ofreciendo una mayor capacidad off-road.

Interior y Equipamiento

El interior de la L200 (MK) era funcional y espacioso, aunque sin grandes lujos. La ergonomía estaba enfocada en la practicidad, con mandos fáciles de usar. El nivel de equipamiento variaba notablemente dependiendo de la versión, desde modelos básicos con lo esencial hasta otros más equipados con aire acondicionado, dirección asistida, elevalunas eléctricos y, en algunos casos, sistemas de entretenimiento más sofisticados. La calidad de los materiales era aceptable para su segmento y precio, aunque con el paso del tiempo algunos componentes podían mostrar signos de desgaste.

Capacidades y Off-Road

La L200 (MK) gozaba de una buena reputación en cuanto a sus capacidades off-road. Su chasis robusto, la elevada altura libre al suelo y la disponibilidad de tracción total la convertían en una pick-up ideal para terrenos difíciles. Las versiones 4x4 ofrecían diferentes sistemas de tracción, algunos con reductora, lo que aumentaba significativamente sus aptitudes en condiciones extremas. Su capacidad de carga y de remolque también eran destacables, dependiendo de la configuración de la pick-up.

Fiabilidad y Mantenimiento

La Mitsubishi L200 (MK) demostró una fiabilidad aceptable, aunque como cualquier vehículo, requería un mantenimiento regular para garantizar su correcto funcionamiento a largo plazo. El acceso a los componentes mecánicos era generalmente sencillo, lo que facilitaba las tareas de mantenimiento y reparación. La disponibilidad de piezas de recambio era y sigue siendo razonablemente buena en la mayoría de los mercados, incluso muchos años después de que cesara su producción.